Con el objetivo de atender las necesidades básicas de la sociedad cantabra, el pasado año 2007 se aprobó la Renta Social Básica regulada en la Ley de servicios sociales de Cantabria.
Según el Instituto cantabro de Servicios Sociales (ICASS), se trata de una "prestación económica de carácter periódico destinada a hacer efectivo el derecho a la protección social de las personas que carecen de recursos económicos".
Atendiendo a los datos recientemente publicados sobre el número de beneficiarios de la misma en nuestra comunidad, se extraen numerosas conclusiones de responsabilidad sobre la gestión y situación actual de Cantabria.
Según la Encuesta de Población Activa (EPA), en Cantabria hay registradas, en el primer trimestre del presente año 44.200 personas en paro. Y de ellas, prácticamente el 30%, concretamente 12.336 personas no perciben ningún tipo de prestación. Una cifra que, mes a mes, va en aumento sin saber dónde está el final del túnel. ¿Hasta cuándo?. Esa es la pregunta del millón.
En Enero del 2008 recibían la renta 432 cantabr@s, en Enero del 2009 pasaron a ser los beneficiarios más de 900, en Abril del 2009 eran 1.117, en Agosto fueron 1.386, cerrando el año 2009 en 1.765 beneficiarios. En Abril del presente ejercicio son 2.008 los cantabr@s beneficiarios de la misma.
Esto indica, como todos sabemos, que la situación en Cantabria es muy delicada, peor de lo que nos quieren hacer ver. Se ha incrementado en casi dos años un 365% el número de beneficiarios. Un indicador real de la cruda situación.
Este incremento tiene grandes repercusiones en las arcas de la administración regional, por supuesto, no cabe duda de ello. Se ha pasado de un coste total en Enero del 2008 de 356.145€ a los 854.186€ del pasado mes de Abril, lo que supone un incremento del 140%.
La cuestión es, de nuevo, la pésima gestión del Gobierno Regional a la hora de afrontar y planificar la situación y los recursos necesarios para hacerla frente. La asignación presupuestaria de 4,2 millones contemplada en los Presupuestos Generales de la comunidad del 2010 para este fin se ha agotado en cuatro meses, teniendo que llevar a cabo una reasignación económica de, al menos, 6,6 millones de euros suplementarios. Gestionar eficientemente un Ayuntamiento, una Comunidad ó un País, no significa actuar en función de los acontecimientos ocurridos a golpe de talón. Una gestión eficiente se basa en anticiparse a los mismos bajo unas premisas básicas: Análisis de la situación, planificación y actuación en consecuencia.
De nuevo se demuestra caso omiso a dichas premisas básicas a la hora de gestionar nuestro presente y futuro. Acaso, ¿Se ha hecho una análisis exhaustivo de la situación actual para planificar los presupuestos acordes al futuro inmediato, y actuar en consecuencia cuando solo llevamos cuatro meses del año y ya se ha agotado la partida presupuestaria?.
Responsable ó no, quienes gestionan nuestra administración no han sabido anticiparse a los graves problemas que venimos padeciendo, y seguiremos padeciendo si no se produce un cambio. Acaso, cuando han establecido la partida presupuestaria agotada en cuatro meses, ¿Pensarían que la situación iba a mejorar en este corto periodo de tiempo?. Inocentes, inocentes,...
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