TU OPINION ES IMPORTANTE:

Si quieres participar en la elaboración y mejora de este blog, manda tus sugerencias y comentarios:

ivan.dr@hotmail.com

5 abr 2010

LA CRUDA REALIDAD ECONOMICA DE TORRELAVEGA Y CANTABRIA (1ª Parte)

En una situación como la que estamos viviendo actualmente, en la que el Producto Interior Bruto de Cantabria se desacelera, y los puntos fuertes sobre los que se ha apoyado hasta ahora la economía cántabra (sector de la construcción, tipos de interés, el consumo, la recepción de fondos europeos,…) se derrumban, no podemos permanecer pasivos ante ella, y mucho menos quiénes tienen la obligación de tomar medidas.

El origen histórico de Torrelavega se ha centrado en una economía basada en la industria y en el comercio, aspectos muy ligados y dependientes uno del otro. Aspectos que han sido abandonados en los últimos años, dando preferencia al sector de la construcción como motor económico y recaudatorio de la zona, sin desarrollar políticas económicas alternativas para un cambio de ciclo como el que vivimos actualmente.

Se debe incrementar el peso del sector industrial dentro de la estructura productiva y económica de Cantabria y, por tanto, de Torrelavega, como sector alternativo a la construcción. Apoyando, por parte de nuestras instituciones locales, aquellos proyectos presentados por nuestras pequeñas, medianas y grandes empresas respetuosos con la normativa vigente y generosos en la creación de puestos de trabajo estables y de calidad. Fomentando así, de nuevo, el consumo y revitalizando el comercio de la zona. Un comercio afectado actualmente por la situación económica de las empresas industriales y de la construcción.

Pero no mediante una industria cualquiera, sino mediante el asentamiento de sectores estratégicos (nuevas tecnologías, energías renovables, robótica, biotecnología, biocombustibles,…), y agilizando las tramitaciones administrativas para que dichos proyectos vean la luz lo antes posible, antes de que sea demasiado tarde. Uno de los principales problemas que tienen nuestras empresas es la falta de competitividad. Para contrarrestar este riesgo es necesario favorecer la competitividad de nuestras empresas mediante la disponibilidad de suelo industrial de calidad (corredor Sniace-Solvay), el fomento del I+D+i, marco normativo y fiscal que fomenten la innovación, la iniciativa empresarial y la inversión, y mediante la implantación de sistemas de formación capaces de responder a los futuros retos.

Nuestros representantes en las administraciones públicas, dejando a un lado las diferencias partidistas, deben desarrollar, en conjunto, un ambicioso plan industrial en Torrelavega, aportando un incremento del Valor Añadido del sector industrial y la competitividad de nuestras empresas, y en colaboración con todas las partes implicadas: empresarios, sindicatos, colegios profesionales, asociaciones de jóvenes empresarios, entidades financieras, administración, políticos y Universidad de Cantabria.

2 comentarios:

  1. Todo lo que has comentado es igualmente aplicable a la economía nacional. No hemos sabido o querido aprovechar que la locomotora se quedaba sin combustible, para abastecerla con nueva energía, y al final, el tren se paró.
    Ahora hay que volver a ponerla en marcha, y eso requiere de mayor energía que si estuviese en marcha (simple principio físico).
    Mirando hacia adelante, es necesario un nuevo cambio de modelo económico, en el que debe de jugar un papel muy importante la Universidad (en este caso la de Cantabria).
    Espero y deseo, que los políticos (que en teoría son los encargados de guiar a la polis) estén a la altura, y sepan captar la verdadera necesidad de la sociedad.

    Muy buenos los comentarios, sigue así.

    ResponderEliminar
  2. Ivan te he dejado tres notas de cata de Rioja en un articulo de Corona desde el Dobra. Espero que te gusten.

    Saludos.

    ResponderEliminar